El Taekwondo es un arte marcial de origen coreano que se ha popularizado en todo el mundo por sus técnicas de patadas y golpes. Esta disciplina se basa en la filosofía de la autodefensa, el respeto y la disciplina. Además, el Taekwondo también es un deporte olímpico desde los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
El Taekwondo es más que una simple técnica de combate. Los practicantes de este arte marcial aprenden a controlar su cuerpo y mente, y a desarrollar su autoconfianza y fuerza interior. A través del entrenamiento, se fortalecen física y mentalmente, lo que les ayuda a enfrentar los desafíos de la vida con más determinación y equilibrio.
El Taekwondo se divide en dos categorías: combate y poomsae. En la primera, los practicantes se enfrentan en un combate uno contra uno, mientras que en la segunda se realizan movimientos preestablecidos en solitario o en grupo. Ambas categorías requieren un alto nivel de técnica, agilidad y concentración.
El Kick Boxing es un deporte de contacto que combina técnicas de boxeo y artes marciales como el karate y el muay thai. Este deporte se caracteriza por el uso de golpes con los puños y las piernas, y es considerado uno de los deportes de combate más completos.
El Kick Boxing se practica tanto como un deporte de competición como para la defensa personal. Los entrenamientos se centran en mejorar la técnica, la velocidad, la fuerza y la resistencia física, así como en desarrollar la disciplina y la autoconfianza.
Los combates de Kick Boxing se dividen en varias categorías según el peso de los participantes y las reglas pueden variar dependiendo de la competición. En general, se permite golpear con puños, pies y rodillas, pero no se permiten golpes bajos ni golpes con la cabeza.
El Kick Boxing es un deporte exigente que requiere una gran preparación física y mental, pero también es una actividad emocionante y gratificante para aquellos que lo practican. Además, es una forma efectiva de liberar el estrés y la tensión acumulada en el día a día.